Cerca de las 04:30, el centro de monitoreo de Tafí Viejo, informó al personal de la comisaría de Lomas de Tafí sobre una fiesta de gran magnitud de forma clandestina que se realizaba en el barrio. Al llegar al lugar se constató que en su interior vendían bebidas alcohólicas y cobraban entradas sin estar autorizados para realizar ese evento.
El propietario de la casa manifestó que la situación se le estaba yendo de las manos ya que las personas que se encontraban en su domicilio no las reconocía y que estaban generando disturbios y peleando, provocándose lesiones entre si mismos.
El personal policial intervino para desalojar la fiesta y constató que la mayoría de los presentes presentaban un aparente estado de ebriedad y se negaban a irse del lugar. Posteriormente comenzaron a lanzar piedras hacia el personal policial sin lograr lesionar a ninguno. Un menor fue aprehendido y trasladado hasta la dependencia policial. Una vez allí el personal de la comisaría se comunicó con la Unidad Especial de Delitos Flagrantes que decidió que no se adoptarían ningún tipo de medidas contra el joven y por lo tanto se retiró de la dependencia policial junto con su madre.
