El desafío de transitar por el Camino del Perú
Nace al norte en la intersección con la ruta 9. Entra a Tafí Viejo, recorre Cebil Redondo y es el límite entre la capital y Yerba Buena. Pero también continúa al sur, para ser la avenida Circunvalación Oeste, junto al canal.
La ruta provincial 315, que conecta el sur de la capital con Tafí Viejo, al norte, es también llamada Camino del Perú. Pero en la Curva de los Vega se bifurca y, hacia el este, también se llama Camino del Perú y lleva a Lomas de Tafí. Tiene la particularidad de estar integrada a diversos centros urbanos y a diario miles de tucumanos la convierten en una de las vías más transitadas.
Nace en la intersección de con la ruta nacional 9, al norte, para entrar a Tafí Viejo (con el nombre de avenida Constitución, luego pasa a llamarse Marco Avellaneda y avenida Julio Roca).
De allí en adelante es conocida como El camino del Perú, recorriendo Cebil Redondo (Villa Carmela) y es el límite entre San Miguel de Tucumán y Yerba Buena. Tomando el nombre de avenida Alfredo Guzmán, continúa su camino al sur, para ser la avenida Circunvalación Oeste, junto al canal.
En sus más de 22 kilómetros de extensión, a la ruta 315 la circulan bicicletas, motos, autos, camionetas, camiones y carros tirados por caballos y al menos cuatro líneas de colectivos, tanto por la calzada como por las banquinas, configurando la experiencia de manejo en una verdadera aventura urbana.
Fuente: La Gaceta