El ejecutivo municipal mantiene vigente la ordenanza 747/19 que prohíbe la comercialización, exhibición, tenencia, manipulación, fabricación, depósito, transporte y venta de fuegos de artificios pirotécnicos cuyos efectos sonoros sean superiores a 84 decibeles. Solo quedan exceptuados de la prohibición los fuegos artificiales de tipo únicamente lumínicos. Esta medida se adecúa a la Ley Nacional 20.429.
Para hacer cumplir la misma, la Dirección de Inspección General realiza los controles pertinentes. A su vez, se reciben denuncias por venta de pirotecnia sonora, que supere los 84 decibeles, en los teléfonos 381-5630463 o 381-5078599 (Defensa Civil). Quien no cumpla con la ordenanza de Pirotecnia Cero será sancionado con multas y clausuras.
En este sentido la Fundación Autismo y Discapacidad de Tucumán, desde sus redes sociales, lleva adelante la campaña denominada ‘Pirotecnia cero, más luces menos ruidos’ para concientizar a la población sobre el uso perjudicial de este producto.
Los estruendos, en general, afectan a chicos con trastorno del espectro autista (TEA) y trastorno generalizado del desarrollo (TGD), enfermos cardíacos, veteranos de guerra, personas con discapacidades cognitivas o neurológicas que no comprenden la causa de las explosiones, bebés, niños con sensibilidad auditiva. Además de afecciones auditivas en humanos, el uso de fuegos de artificio genera en los animales taquicardia, temblores, falta de aire, náuseas, aturdimiento, pérdida de control, miedo y/o muerte.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) establece que el oído tiene como tolerancia máxima al ruido un umbral de 65 decibeles (dB) luego de eso ya genera afecciones. Los artificios pirotécnicos sonoros superan los 140 decibeles, lo que produce en las personas afecciones auditivas y extra auditivas negativas.
Publicado enMunicipalidad de Tafi Viejo