En un contexto de aumento en los precios de los combustibles, es crucial para los conductores encontrar formas de ahorrar y optimizar el uso de nafta o gasoil en sus vehículos. Aquí te presentamos algunos consejos para lograrlo:
- Acelerar menos: Reducir la aceleración agresiva en entornos urbanos puede disminuir significativamente el consumo de combustible. Optar por una aceleración moderada y cambiar de marcha rápidamente contribuye al ahorro de nafta y favorece la durabilidad del vehículo.
- Cargar nafta Súper en lugar de Especial: Si tu vehículo lo permite, opta por nafta Súper en lugar de Especial o Premium para ahorrar costos. La mayoría de los autos admiten nafta Súper, que cumple con los requisitos de octanaje para la mayoría del parque automotor.
- Chequear el inflado de neumáticos: Mantener la presión de inflado de los neumáticos dentro de los parámetros recomendados por el fabricante garantiza un desplazamiento eficiente y seguro, reduciendo así el consumo de combustible.
- Chequear la alineación de las ruedas: Una correcta alineación de las ruedas evita la resistencia adicional al avance del vehículo, lo que se traduce en un menor esfuerzo del motor y, por ende, en un menor consumo de combustible.
- Optimizar el uso del aire acondicionado: Evita exponer el vehículo directamente al sol y airea el interior antes de encender el aire acondicionado. Orienta las salidas de aire hacia el techo del vehículo para combatir el calor sin generar una sensación de frío directa sobre los ocupantes.
- Mantener los filtros limpios: Revisa y limpia regularmente el filtro de aire del motor y el filtro de polen para garantizar una mezcla adecuada de aire y combustible, así como un funcionamiento óptimo del sistema de climatización.
- Verificar el estado de las bujías: Unas bujías en buen estado garantizan una combustión eficiente, lo que se traduce en un menor consumo de combustible. Realiza un mantenimiento periódico del vehículo y cambia las bujías según las recomendaciones del fabricante.
Siguiendo estos consejos y adoptando hábitos de conducción más eficientes, puedes reducir significativamente tu gasto en combustible y contribuir a una movilidad más sustentable.